No tenía ni idea de quien era el personaje (pese a sus mediáticos devaneos con Madonna) hasta que lo vi, por casualidad, en un especial de HBO. Ahora estoy pendiente de su asombroso trabajo y de esta, su mas dura prueba:

"...ENTRETENIMIENTOS

El ilusionista David Blaine, a punto de batir el record mundial de resistencia física

El domingo, tras 44 días confinado en una caja de cristal suspendida sobre el río Támesis, en Londres, Inglaterra, el mago estadounidense podría convertirse en “El Houdini moderno”.

Por Mariana Nisebe. De la Redacción de Clarín.com .

El mago norteamericano David Blaine planea cumplir el domingo el objetivo más osado de todos los que se fijó en su vida: batir el récord mundial de resistencia física. El ilusionista, de 30 años, permanece confinado desde hace 44 días en una caja de metacrilato suspendida sobre el río Támesis, que atraviesa Londres, en Inglaterra, a puro ayuno y apenas conectado al mundo por dos tubos (uno, por el que recibe agua sin sales ni vitaminas y otro para que los médicos controlen su estado de salud, a través de análisis diversos y permanentes. Blaine ingresó a su nueva “casa” con apenas una manta, una birome, una caja de pañuelos de papel y manteca de cacao para los labios. Su hazaña puede monitorearse en vivo a través de su página en Internet, www.davidblaine.com.

También conocido con el pretencioso título “El Houdini moderno”, Blaine no sólo ganó fama por su desempeño como mago sino, también, por sus constantes desafíos físicos. El 5 de abril de 1999 se sumergió durante una semana en un tanque de agua. Más recientemente, permaneció parado durante 35 horas sobre una columna de 24 metros de altura en el centro de Nueva York. Poco después, se auto enterró en un bloque de hielo durante 61 horas... Finalmente, el 5 de septiembre inició su experimento más extremo, el que concluye el domingo. Muchos sostienen que Blaine no es un mago, ya que sus desafíos no son trucos ni ilusiones sino, más bien, pruebas de resistencia física.

Sin embargo, el norteamericano ha sorprendido más de una vez a sus seguidores, levitando entre la gente, en plena ciudad, sin escenografías ni efectos especiales. ¿Cómo hace? Su nueva proeza le concedió muchísima publicidad, pero no le bastó para ingresar al libro "Guinness" de los records (www.guinnessworldrecords.com). Sus directivos fueron claros: no respaldan "records de ayuno" que suponen peligros para la salud. Cabe recordar que el récord de aislamiento pertenece al texano Bill White, quien permaneció enterrado a 2 metros de profundidad durante 141 días, y el de ayuno, al británico Dennis Goodwin, cuya huelga de hambre en la prisión de Wakefield, Gran Bretaña, terminó en julio de 1973 tras 385 días.

La historia de Blaine se parece bastante a la de cualquier chico que nació en Brooklyn, Nueva York, sólo que él se destacó como mago callejero desde pequeño. No fue hasta los 90 que, tras desplegar sus trucos de magia en varios bares elegantes de Nueva York, a los que asistía gente como Leonardo Di Caprio, empezó a hacerse realmente conocido. Hoy, esa vida ya no lo atrae, asegura. Dejó de tomar alcohol el año pasado y se concentró en aprender a estar solo, preparándose a la idea de pasar 44 días en una caja. "Esa es la mayor tortura para mí", ironiza Blaine.

Su secreto mejor guardado es por qué eligió pasar sus 44 días de reclusión sobre el Támesis, pero se sospecha que el fundamento de su capricho es que cumple años el 4 de abril, es decir, el 4 del 4. Aunque hasta no hace mucho había conservado la calma, esta última semana, el ilusionista comenzó a comportarse de forma muy extraña en su “casa” de cristal, desde la que, incluso, se dirigió a un grupo de visitantes de la Torre Bridge para decirles que ayunaba debido a la muerte de su madre. También manifestó que, siendo joven, vio cómo ella moría "de una muerte prodigiosa", que "se consumía y, sin embargo, sonreía y encontraba amor incluso en las peores condiciones. Yo también debo encontrar belleza en el sufrimiento", agregó.

Blaine, que tiene previsto continuar su experimento hasta el pasado mañana, parece haber comenzado a “perder la razón". La prensa dice que "su inconsciente lo presiona para que abandone" y los médicos aseguran que "pronto podría comenzar a tener alucinaciones". Al comienzo de la prueba, al mago le tiraron con todo: desde tubos fluorescentes quemados, hasta bananas, huevos, frutas y hasta papas. Ahora, a sólo dos días de lograr su objetivo y de haber resistido el encierro, el hambre y algunas muestras de desprecio, parece haber cambiado el pensamiento de la gente, que cada vez se acerca más, sin objetos extraños, sólo para alentarlo..."

Tomado de: Clarín.